Despedida de autoridades que se retiran de Cumbre Judicial Iberoamericana
Miércoles, 21 Mayo 2025
La intensa agenda de reuniones que precedieron a la celebración de la XXII Asamblea Plenaria de la Cumbre Judicial Iberoamericana se constituyó en un espacio de diálogo y coordinación "para avanzar
la ejecución de proyectos regionales y consolidar una visión compartida sobre el futuro de la justicia en Iberoamérica". Así lo estableció el magistrado puerrtorriqueño Sigfrido Steidel Figueroa en el informe de la Comisión de Coordinación y Seguimiento encargada de dar seguimiento a los compromisos asumidos por los países miembros y canalizar el trabajo interinstitucional que la Cumbre despliega entre una edición y otra. La ocasión fue propicia para elogiar el aporte de algunas figuras prominentes del ámbito iberoamericano, entre la que se incluyó a una integrante de la Suprema Corte de Justicia de Uruguay.
La XXII Asamblea Plenaria de la Cumbre Judicial Iboeroamericana tuvo lugar en Santo Domingo (República Dominicana) durante los días 14 a 16 de mayo de 2025.
Al compartir su informe Steidel explicó que "uno de los temas centrales abordados por la Comisión de Coordinación y Seguimiento a lo largo de esta edición fue el siempre relevante tema de la independencia judicial, pilar esencial de cualquier Estado de derecho y condición indispensable para que la judicatura pueda ejercer sus funciones con imparcialidad, sin presiones indebidas, interferencias externas ni amenazas a su integridad".
Añadió que "esta independencia no es un privilegio de los jueces, sino una garantía para la ciudadanía y una condición para la vigencia efectiva de los derechos humanos, la igualdad ante la ley y la resolución justa de los conflictos".
Además, sostuvo que "en los últimos años, hemos sido testigos de cómo este principio fundamental puede verse erosionado, incluso en democracias consolidadas, por dinámicas políticas polarizadas, campañas de desinformación, presiones mediáticas o reformas institucionales orientadas a debilitar el equilibrio de poderes". Frente a estos desafíos se propuso "la incorporación de mecanismos concretos que permitan evaluar, de manera objetiva y periódica, el estado de la independencia judicial en los distintos países iberoamericanos", lo que implica "la elaboración de informes técnicos y pronunciamientos institucionales consensuados, siempre que las circunstancias lo requieran, como expresión de una defensa colectiva, activa y solidaria de los valores fundamentales que sustentan nuestros sistemas de justicia".
Al final de su intervención, Steidel destacó las aportaciones de Mariem Vicky de la Rosa Bedriñana, María Thereza Rocha de Assis Moura, el Comisionado Juan Martínez Moya, del Reino de España, y la Ministra de la Suprema Corte de Justicia de nuestro país, Dra. Elena Martínez Rosso, quien cierra su carrera judicial en el presente año por haber alcanzado el límite de ejercicio impuesto por el art. 237 de la Constitución de la República.
El informe también destaca las "valiosas aportaciones" de la Dra. Martínez en la Comisión de Coordinación y Seguimiento y en la Comisión Iberoamericana de Ética Judicial, que "enriquecieron significativamente las discusiones y el rumbo colectivo del trabajo iberoamericano, gracias a su visión¡ estratégica, su capacidad de diálogo y su compromiso constante con el fortalecimiento institucional".
Y agregó el magistrado informante que "con firmeza y respeto, con claridad y empatía, ejemplificó que el ejercicio de la función judicial puede llevarse adelante con dignidad, conciencia y humanidad", razón por la cual "su legado trasciende cualquier función institucional y permanecerá como una guía para todos nosotros".
la ejecución de proyectos regionales y consolidar una visión compartida sobre el futuro de la justicia en Iberoamérica". Así lo estableció el magistrado puerrtorriqueño Sigfrido Steidel Figueroa en el informe de la Comisión de Coordinación y Seguimiento encargada de dar seguimiento a los compromisos asumidos por los países miembros y canalizar el trabajo interinstitucional que la Cumbre despliega entre una edición y otra. La ocasión fue propicia para elogiar el aporte de algunas figuras prominentes del ámbito iberoamericano, entre la que se incluyó a una integrante de la Suprema Corte de Justicia de Uruguay.
La XXII Asamblea Plenaria de la Cumbre Judicial Iboeroamericana tuvo lugar en Santo Domingo (República Dominicana) durante los días 14 a 16 de mayo de 2025.
Al compartir su informe Steidel explicó que "uno de los temas centrales abordados por la Comisión de Coordinación y Seguimiento a lo largo de esta edición fue el siempre relevante tema de la independencia judicial, pilar esencial de cualquier Estado de derecho y condición indispensable para que la judicatura pueda ejercer sus funciones con imparcialidad, sin presiones indebidas, interferencias externas ni amenazas a su integridad".
Añadió que "esta independencia no es un privilegio de los jueces, sino una garantía para la ciudadanía y una condición para la vigencia efectiva de los derechos humanos, la igualdad ante la ley y la resolución justa de los conflictos".
Además, sostuvo que "en los últimos años, hemos sido testigos de cómo este principio fundamental puede verse erosionado, incluso en democracias consolidadas, por dinámicas políticas polarizadas, campañas de desinformación, presiones mediáticas o reformas institucionales orientadas a debilitar el equilibrio de poderes". Frente a estos desafíos se propuso "la incorporación de mecanismos concretos que permitan evaluar, de manera objetiva y periódica, el estado de la independencia judicial en los distintos países iberoamericanos", lo que implica "la elaboración de informes técnicos y pronunciamientos institucionales consensuados, siempre que las circunstancias lo requieran, como expresión de una defensa colectiva, activa y solidaria de los valores fundamentales que sustentan nuestros sistemas de justicia".
Al final de su intervención, Steidel destacó las aportaciones de Mariem Vicky de la Rosa Bedriñana, María Thereza Rocha de Assis Moura, el Comisionado Juan Martínez Moya, del Reino de España, y la Ministra de la Suprema Corte de Justicia de nuestro país, Dra. Elena Martínez Rosso, quien cierra su carrera judicial en el presente año por haber alcanzado el límite de ejercicio impuesto por el art. 237 de la Constitución de la República.
El informe también destaca las "valiosas aportaciones" de la Dra. Martínez en la Comisión de Coordinación y Seguimiento y en la Comisión Iberoamericana de Ética Judicial, que "enriquecieron significativamente las discusiones y el rumbo colectivo del trabajo iberoamericano, gracias a su visión¡ estratégica, su capacidad de diálogo y su compromiso constante con el fortalecimiento institucional".
Y agregó el magistrado informante que "con firmeza y respeto, con claridad y empatía, ejemplificó que el ejercicio de la función judicial puede llevarse adelante con dignidad, conciencia y humanidad", razón por la cual "su legado trasciende cualquier función institucional y permanecerá como una guía para todos nosotros".
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Miércoles, 21 Mayo 2025